Lambayeque: Tierra de soberanos, pirámides y bosque - Lambayeque

Bien lo dijo la ‘Morena de oro del Perú’: “Que viva el departamento de Lambayeque, con su capital Chiclayo, Monsefú y Reque”. La cantante afroperuana de vals, Lucha Reyes, nació en Lima. Sin embargo, cada vez que entonaba esa entrañable canción lo hacía con el sentimiento puro de sentirse parte de esta región norteña. Porque es así: quien visita Lambayeque, no vuelve a ser el mismo. Por el calor de su gente, por su historia milenaria o por su gastronomía destacada y valorada por todo aquel que la prueba, vas a querer que esta región te adopte como un hijo o hija más de su enorme y noble pueblo.

Ubicado en la costa norte del Perú, Lambayeque es una de las regiones con mayor crecimiento turístico del país. La facilidad para llegar a esta zona (1 hora y 15 minutos por vía aérea –desde Lima-) la convierten en un lugar asediado por los turistas, tanto peruanos como extranjeros. Su clima soleado, es una de las exquisiteces de la región, por lo que todos los amantes de las playas apuntan a Lambayeque para pasar sus vacaciones.

Y no es para menos: cuentan con balnearios únicos y hermosos, que no tienen nada que envidiar a las mejores costas del planeta. Los más conocidos y destacados son el balneario de Pimentel, donde puedes apreciar caballitos de totoras, estas balsas que los antepasados lambayecanos utilizaban para pescar; y la caleta Santa Rosa, distinguida por su enorme y colorido varadero, lleno de botes multicolores.

El señor de Sipán te espera

¿Amante de la historia milenaria? En Lambayeque existe el material suficiente para saciar esa sed de conocimiento: uno de las primordiales muestras es el Complejo Arqueológico Huaca Rajada, donde en 1987, se descubrió la tumba del Señor de Sipán, otrora gobernante de la cultura Mochica y considerado como uno de los hombres más importantes del antiguo Perú.

La zona donde se evidenció este monumental hallazgo, que paralizó al mundo entero pues su tumba estaba intacta, cuenta con su museo de sitio, donde se exhiben algunas otras piezas encontradas a su alrededor como utensilios, ofrendas y cerámicas, entre otros. Sin embargo, las pertenencias del Señor de Sipán se exhiben en el Museo Nacional Tumbas Reales de Sipán, que fue inaugurado en 2002. Aquí, yace el ajuar funerario del Señor de Sipán, además de sus más íntimas posesiones encontradas por los arqueólogos peruanos Walter Alva y Luis Chero Zurita. El Museo Bruning, donde se exhiben piezas de oro, plata y bronce de más de 4 mil años de antigüedad, también es una buena opción para dar un paseo didáctico.

Después de esta visita cultural, es momento de engreír al estómago y paladar. Y en Lambayeque, eso es muy sencillo: su gastronomía es aclamada por todo aquel que la prueba, ya que guardan secretos milenarios que le otorgan una sazón distinta a sus platillos. No te despidas de esta tierra sin probar un delicioso Arroz con pato, un Seco de cabrito, un Espesado lambayecano o un Chinguirito, que coquetea con la deliciosa comida marina.